La representante del Banco Mundial (BM) en República Dominicana, Alexandria Valerio, afirmó que el sector agrícola del país es crucial para su desarrollo económico y social, y destacó su papel como motor de la economía.
En su participación en el XXVI Encuentro de Líderes del Sector Agropecuario, celebrado en Punta Cana del 4 al 6 de septiembre, Valerio calculó que la agricultura y la ganadería representan un 8% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, ocupan un 14% de la fuerza laboral y generan alrededor de un cuarto de las exportaciones nacionales.
Valerio señaló que «el sector agroalimentario está en el centro de la solución del país» para enfrentar retos clave, como aumentar la competitividad, mejorar el crecimiento y lograr una mayor contribución en términos ambientales y de seguridad alimentaria.
“Este sector es fundamental para resolver los desafíos que enfrenta la República Dominicana en términos de desarrollo económico, no solo por su contribución directa, sino también por su capacidad de impulsar otros sectores productivos”, apuntó.
El encuentro, que reúne a más de 650 líderes del sector agropecuario de toda la geografía nacional (desde Pedernales hasta Montecristi y el Este de la nación), incluidos presidentes de federaciones, asociaciones y cooperativas, así como representantes de organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y la FAO, sirve como plataforma para discutir los desafíos y oportunidades que enfrenta la agropecuaria dominicana.
Este año, el evento tiene como tema central “Los desafíos para alimentar a más de 20 millones de consumidores en República Dominicana”, y aborda los aspectos críticos para mejorar la productividad agrícola y asegurar un crecimiento sostenible.
Mirada global
Alexandría también destacó el apoyo que el Banco Mundial brinda a proyectos y políticas que buscan mejorar la productividad agrícola, el acceso a los mercados y la resiliencia al cambio climático en 90 países, lo que ha beneficiado a más de 296 millones de personas.
En este contexto, subrayó la importancia de adoptar políticas claras que permitan al sector agrícola adaptarse y prosperar en un entorno cambiante, marcado por la volatilidad climática y la creciente demanda de alimentos.
Entre los principales desafíos que enfrenta la agropecuaria en la República Dominicana, de acuerdo con conocedores del tema, se cita la baja competitividad del sector, el acceso limitado a mercados internacionales, la exposición a desastres naturales, y las deficiencias en la capacidad institucional.
Y se ha dicho que por estas dificultades se requiere una mejor coordinación entre los sectores público y privado, el fortalecimiento de las capacidades técnicas y la adopción de tecnologías avanzadas que mejoren la eficiencia y la sostenibilidad del sector.
En este sentido, Valerio hizo hincapié en la necesidad de contar con una infraestructura adecuada y resiliente que permita a los pequeños productores acceder a mercados tanto nacionales como internacionales.
Destacó que uno de los puntos clave para el éxito del sector agrícola es la mejora de la infraestructura rural, como los caminos rurales, que faciliten la distribución y comercialización de los productos. También subrayó la importancia de reducir las pérdidas poscosechas, un aspecto crucial para garantizar la sostenibilidad y la eficiencia del sector.
La cuestión climática
Otro de los temas abordados por Valerio fue el cambio climático y su impacto en la producción agrícola. La representante del Banco Mundial enfatizó que la adaptación y mitigación del cambio climático deben estar en el centro de las políticas agrícolas en la República Dominicana. Señaló que la adopción de medidas de producción climáticamente inteligentes, como la eficiencia en el uso del agua y la implementación de tecnologías sostenibles, son fundamentales para garantizar la resiliencia del sector ante eventos climáticos adversos.
A nivel global, el Banco Mundial ha proporcionado aproximadamente 2,980 millones de dólares en nuevos compromisos para la agricultura y sectores relacionados en el ejercicio fiscal de 2024.
Estos recursos se han dirigido a programas que buscan mejorar la productividad y la resiliencia en el sector agrícola, trabajando en conjunto con organismos internacionales como el BID, la FAO y otros actores clave. Valerio mencionó que, a nivel global, la agricultura representa alrededor del 4% del PIB, pero en países menos desarrollados, este porcentaje puede llegar hasta el 25%, lo que evidencia la relevancia del sector en las economías más vulnerables.
En cuanto al contexto local, Valerio destacó los beneficios económicos y sociales que un sector agrícola dinámico puede generar para la República Dominicana, tales como la creación de empleo, el aumento de ingresos y el desarrollo rural.
Resaltó que la agricultura no solo es clave para el crecimiento económico, sino también para la seguridad alimentaria, especialmente en un contexto en el que se espera alimentar a más de 20 millones de personas en el país en los próximos años, como se ha explicado en la actividad de Punta Cana.
Una cita obligada cada año
El XXVI Encuentro Nacional de Líderes del Sector Agropecuario no solo se centra en los logros alcanzados hasta la fecha, sino que también apunta hacia el futuro, buscando estrategias para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que se presentan.
Durante las jornadas, se discutió la importancia de fortalecer la colaboración entre el sector público y privado, así como de promover la innovación tecnológica y la planificación para enfrentar los retos del cambio climático.
Valerio reafirmó el compromiso del Banco Mundial con la República Dominicana. Desde su punto de vista, la clave para el desarrollo de un ramo agrícola dinámico y sostenible radica en una gobernanza efectiva, el fortalecimiento institucional y la adopción de tecnologías avanzadas.